Creerse más capaces de lograr sus objetivos, con más confianza en ellos y en sus posibilidades.
Ser una persona más libre y realizada porque sienten que ya no se pones trabas y ven un avance real en su vida.
Sentir que pueden ayudar mejor a los suyos a cuestionarse sus creencias y a pensar por ellos mismos.
Ser una persona menos manipulable, capaz de establecer sus propios razonamientos y que no depende tanto de la opinión externa.
Liberarse de las creencias que ralentizaban su avance, porque saben cómo cuestionarlas, sintiéndose más competense y empoderados.
Ganar tiempo y ser más eficaz de cara a sus objetivos porque ya no marean la perdiz y sus pensamientos les facilitan el camino.